Mozárabe de las Hurdes
El Camino Mozárabe de Las Hurdes es una ruta alternativa y desconocida que recupera una vía jacobea olvidada con el objetivo de descubrir una zona llena de misterio, paisajes mágicos y tradiciones que pretende sorprender a todos los viajeros que deciden elegir este camino. Esta ruta se enmarca dentro de un antiguo camino de peregrinación que, en la época medieval, era utilizada por aquellos que querían visitar la tumba del Apóstol.
El punto de inicio ya es un lugar sorprendente. Se trata de Galisteo, un pueblo declarado conjunto histórico en 1991 posee una muralla almohade en excelente estado de conservación. Para continuar la ruta, es necesario cruzar su puente medieval para atravesar el Valle del Alagón, zona cultivos en bancales y olivares.
El camino sigue hasta Montehermoso para adentrarse en las tierras de Granadilla y llegar hasta otro lugar singular del camino, el petroglifo de la Piedra de la Rueca en Casar de Palomero. Es un grabado prehistórico donde se observan líneas, flechas y círculos que cuentan una historia.
Con esta ruta se intenta recuperar las raíces mozárabes de la región. Este camino se adentra en Las Hurdes, situada en el norte de la provincia de Cáceres, comarca de tradiciones arraigadas como el singular Carnaval hurdano, manjares como la miel y zona. Una tierra que ha conservado gran parte de su patrimonio natural y cultural y que recibió la visita de personajes tan ilustres como Alfonso XIII, Unamuno, Buñuel o Gregorio Marañón entre otros.
Por último, el Camino Mozárabe termina en Riomalo de Abajo. Para poner el broche de oro a este camino, tendrás que llegar hasta uno de los símbolos de la región, el meandro El Melero, donde el río Alagón crea una curva casi imposible que sirve de frontera natural entre las provincias de Cáceres y Salamanca.
